jueves, 12 de junio de 2014

La Historia de Srinivasa Ramanujan y la Diosa Namagiri

Adolfo R. Ordóñez y Patricia Ordóñez 
Introducción

Todos sabemos que Piscis es un signo vinculado a los sueños, a la intuición, al Mundo del  Inconsciente Colectivo y de su contenido de Arquetipos, en general. Virgo, su signo complementario, por otra parte, está regido por una Virgen.

Pues bien, verán que esta historia real que hoy les contaremos involucra al eje Piscis / Virgo.

Es una de las historias más magníficas y deslumbrantes que hemos escuchado; tanto es así, que parece salida de un cuento oriental, de ésos que nos narraban cuando éramos niños, antes de irnos a dormir; sólo que ésta vez, sucedió así, tal cual...


Historia

Había una vez, un famoso matemático indio, llamado Srinivasa Ramanujan.

Cuenta la historia que la mamá de Ramanujan ansiaba quedar embarazada y  no podía. El que sería el abuelo materno de Ramanujan, preocupado por las dificultades de su hija para concebir a un niño, invoca a la Diosa Namagiri, y le pide un vástago para su hija. Resulta ser que la dama queda embarazada, y así se establece un vínculo de sincero agradecimiento hacia esta diosa hindú, pues siente que le debe a ella el nacimiento de su hijo. La Diosa Namagiri es un personaje importante en esta historia, pues la veremos aparecer en notables ocasiones. Así que prestémosle atención.

Srinivasa nace en el seno de una familia de brahmines ortodoxos, la casta noble de la India. Pero su familia era muy humilde, tal es así que Ramanujan, a pesar de mostrar tempranamente grandes dotes para las matemáticas carecía de los medios  óptimos para estudiar en algún centro educativo importante, y por eso se convierte en un matemático autodidacta. Como sus padres carecían de los medios adecuados, lo enviaron a la escuela del pueblo.


"A los 12 años dominaba la trigonometría, y a los 15 le prestaron un libro con 6.000 teoremas conocidos, sin demostraciones. Ésa fue su formación matemática básica. En 1903 y 1907 no aprobó los exámenes universitarios porque sólo se dedicaba a sus diversiones matemáticas." [1]

Ramanujan contaba que todas las noches él dejaba su cuaderno de trabajo sobre su mesita de luz, pues estaba acostumbrado a que mientras dormía la Diosa Namagiri se le apareciera mostrándole resultados de problemas matemáticos, los cuales anotaba ni bien se despertaba.

A los 25 años, Ramanujan es alentado a mostrar sus resultados a grandes matemáticos. Así es que le envía una carta a Godfrey Harold Hardy, un distinguido matemático de Cambridge, quien por ese entonces era uno de los matemáticos más reconocidos de su época. El matemático indio le pregunta a Hardy si los resultados que él había obtenido tenían algún valor.

Hardy recibe la carta,  y si bien algunos de los resultados enviados por Ramanujan le eran ya conocidos, asombrado observa que muchos otros eran originales, desconocidos y además, correctos: El material era absolutamente innovador. Hardy se encontraba frente a un prodigio de las matemáticas. Dándose cuenta del valor matemático de Ramanujan, Hardy le contesta que podría conseguirle una beca y llevarlo a Cambridge a estudiar con él.

Entusiasmado con la noticia, pero respetando las costumbres brahmánicas, Ramanujan corre a contarle esta noticia a su madre, solicitándole su autorización para viajar y estudiar en un país extranjero.

Para su asombro, la madre se niega rotundamente a que acepte la beca. A lo cual, el matemático indio responde obedeciendo sumisamente al dictamen materno, y escribiéndole una carta a Hardy, agradeciéndole su ofrecimiento, pero "explicándole" porqué no puede aceptarlo.

Sin embargo, habría un giro en el destino de Ramanujan: por esos días, su madre sueña que se le presenta la Diosa Namagiri molesta con ella, interpelándola. En el sueño, su hijo se encontraba en una gran sala rodeado de europeos con quienes hablaba de matemáticas. Y la Diosa le objetaba a ella que primero le hubiera solicitado un hijo, para luego oponerse a que él pudiera realizar su destino.

Sin demora, al día siguiente al despertar, la madre de Ramanujan le cuenta a su hijo el sueño, y que por lo tanto, había cambiado de opinión: le daba permiso para viajar a Inglaterra.

¡Imaginémonos la sorpresa de Hardy, flemático intelectual inglés, al enterarse que Ramanujan finalmente viajaría, y el motivo por el cual ahora sí podría viajar!
¿No es ésta una maravillosa historia con bellas sincronicidades?

Principio de Sincronicidad

El Principio de Sincronicidad, enunciado por Carl G. Jung, muestra que hay situaciones que están relacionadas entre sí en el tiempo y/o en el espacio pero no a partir de la tradicional relación  de 'Causa-Efecto' a la cual estamos tan acostumbrados los occidentales. Según este principio , dos o más cuestiones pueden estar vinculadas entre sí, y esta relación ser significativa a pesar de que el vínculo sea 'acausal'. Además, esta relación entre diferentes temas, necesariamente involucra tanto al mundo externo como al mundo subjetivo, como sucede en el caso de Ramanujan. Es decir, en toda sincronicidad, hay implicado siempre, además de elementos externos, factores del mundo anímico.

Para terminar, les comentamos que como se imaginarán, hay más historias asombrosas vinculadas a Ramanujan, como también a Pauli, de quien contamos el mes pasado una llamativa sincronicidad vinculada a Acuario. Dejamos estas  historias 'leudando' en nuestra cocina interior para narrárselas en otra propicia ocasión.

Nuestros saludos.

Adolfo y Patricia





[1] Fuente: Wikipedia

4 comentarios:

  1. Que lindo que en el mundo de la vida cotidiana nos ocurren situaciones extra atemporales donde las Diosas y los humanos construyen un presente

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  2. Me encanto la historia, los humanos necesitamos de los Dioses para cumplir nuestro y seguir nuestro destino. Lo curioso es que sean los sueños el reino donde humanos y Dioses compartimos Existencia. Quisiera conocer más de Namagori,seguramente será a través de Ramanujan

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