Las Sincronicidades astrológicas en
la práctica psicoterapéutica Junguiana
Psicóloga, Astróloga, y Ms. en Psicología Analítica,
Patricia Fernández Acosta
Carl G. Jung
afirmaba que la Psique se manifiesta tanto a nivel subjetivo (nuestro mundo
interno, nuestro registro vivencial), como en lo objetivo (el mundo
externo). Esta noción ampliada de ‘Psique’ es necesaria para su concepto innovador de ‘sincronicidad’
.
De hecho, denomina
al Inconsciente Colectivo, "Inconsciente Objetivo", pues además de constituir la Base anímica común de
la Psique en la Especie humana; sus manifestaciones se observan, asimismo en el
mundo externo.
En la práctica
psicológica (en mi caso la combino con la astrológica), las sincronicidades se
manifiestan constantemente.
Acerca de porqué
elijo un ejemplo de tránsitos astrológicos
para mostrar sincronicidades evidentes –como verán a continuación-, sólo diré
que fue el mismísimo Jung quien eligió a la Astrología como la via regia de observación de las mismas (en
su libro “Acerca de la naturaleza de la Psique”). Nótese, entre
paréntesis, la importancia que le daba Jung a la Astrología, pues inicialmente,
buscó demostrar la Sincronicidad con el I Ching, libro que prologó. Pero luego
subrayó que era la Antigua Disciplina Estelar la que permitía la elaboración de
estadísticas, lo cual era más oportuno para la introducción académica de aquél
concepto (sincronicidad).
Les daré, para
mostrarlo, un ejemplo personal de esto: Vengo atravesando un tránsito de Plutón
sobre mi Luna natal.
Plutón, constituye un Arquetipo de Poder Destructor,
Renovador de las formas y de Transmutación alquímica, que conlleva la necesidad
de elaborar duelos.
La Luna simboliza al
Arquetipo de la función Nutricia materna, la cual está conectada con el cuidado,
el refugio contenedor, el sentido de identidad por pertenencia, los vínculos
madre- hijo, el hogar, las raíces, etc.). Si realizáramos una práctica en donde
la diferenciación "yo- tú", fuera absoluta (característica del paradigma positivista
–mecanicista –causalista y de lógica dual), la propia existencia se percibiría
como plenamente separada de la del "otro".
Sería algo así: “Mi subjetividad está en mi interior, y la objetividad está allá afuera,
en lo exterior, y ambas se hayan desvicunladas –subjetividad y objetividad-,
desconectadas entre sí.” He aquí un
enunciado que arroba la dualidad, la
causalidad (la cual afirma que una, causa efectos medibles sobre la otra, y viceversa), y que
excluye los vínculos acausales (necesarios
para explicar la sincronicidad, y presentes, por ejemplo, en la Física
Cuántica).
Sin embargo, lo que
sucede cotidianamente en el consultorio psicológico, evidencia lo contrario, demuestra la profunda interconexión
"mundo interno-mundo externo", así como la resonancia holográfica (cada
parte contiene información plegada del "Todo"); por la cual, las ‘Psiques’ y el ‘Mundo’, están plenamente interconectadas y compartiendo energía-información. Éste es el
Principio básico sobre el cual se sustenta la noción de ‘sincronicidad’.
Les daré algunos ejemplos personales de ‘sincronicidades’ actuales que dejan en evidencia la interconexión "Mundo Interno- Mundo Externo": Por un lado, las manifestaciones en mi propia vida personal del tránsito citado
(muerte de una muy querida mascota hogareña, que marcó el final de un capítulo
vital relacionado con la familia, en simultáneo con temas de construcción de una casa
familiar, así como la elaboración personal de duelos, y la presencia de familiares que atraviesan situaciones
irreversibles. Por otro, y coincidiendo espacio-temporalmente, citaré algunas de las historias de pacientes que
me toca acompañar en este tiempo en el consultorio. Este tipo de correlaciones
simbólicas serían impensables desde un abordaje positivista, causalista y de
lógica dual o binaria. Pero son posibles desde un paradigma que incluya la
vivencia del Unus Mundus (Carl G. Jung,
Mircea Eliade), pleno de entrelazamientos
de información de tipo cuántico entre
los diferentes campos morfogenéticos (David Bohm-Rupert Sheldrake) y, estrechamente
vinculado al concepto de Inconsciente Colectivo (Jung).
Observen la impresionante conexión y resonancia con los Arquetipos Luna-Plutón
vinculados entre sí
(Lo que sigue abajo, lo escribo
respetando la confidencialidad paciente- terapeuta):
· 1) Una “madre medusa”, tentacular (madre plutoniana), absolutamente
invasora del campo vital de su hija, la cual acaba de iniciar una vida en
pareja. Atiendo a la hija, a quien le es sumamente dificultoso abrirse a esa
nueva etapa acompañando el nuevo proyecto vital, pues la invade la culpa. Esa madre
se ‘mete’ en el nuevo espacio compartido por la hija y su marido, aunque no le
corresponda. Opina, hace juicios, interviene y decide por la pareja. No asume
que un ciclo llegó a su fin, el cual viene acompañado con modificaciones
profundas del rol materno. Y esa hija, también, está intentando, con
dificultades ‘soltarse’ de esa madre pulposa quien con sus tentáculos invade nuevos
espacios ‘lunares’ de gestación de refugio y de un renovado sentido de hogar,
en los cuales no estará renovadamente incluida, si no resignifica su rol y status.
· 2) Dos casos de pacientes cuyas madres acaban de fallecer y estoy
acompañando la elaboración de su duelo.
· 3) Otra paciente, cuya mamá también falleció hace poco tiempo. Esta
situación derivó en la venta de la casa familiar (la cual simbolizaba todo un
capítulo de la historia familiar).
· 4) Otra historia: una mamá, que está viviendo el destete de su beba (simultáneamente
a la muerte de una perrita que fue muy guardiana del hogar durante 15
años).
· 5) Una mujer, con una cirugía de Útero (órgano vinculado a la maternidad),
y cuyos hijos están terminando sus carreras. La extracción del útero marca el
fin de la procreación y, por lo tanto, de una etapa vital femenina –materna.
· 6) El caso de una madre que acompañó la enfermedad terminal de su hijo
hasta su fallecimiento, y que está atravesando un profundo duelo,
también.
· 7) Otra madre, que se encuentra duelando la partida de su hija adolescente,
quien inicia su vida, ahora, independiente en otra casa, lejos de ella.
Estos cuatro últimos casos, marcan
indudablemente, cambios irreversibles (Arquetipo plutoniano de finales y
renacimientos a nuevos estadios vitales) en la función materna (Arquetipo lunar-
materno).
· 8) Dos pacientes que han decidido recibir fertilización asistida, previa
frustración de no lograrlo por medios propios. Aquí también podemos observar la
articulación de los arquetipos Lunar – Plutoniano.
Reflexión final:
Como observan, en todas las historias
vitales citadas, se evidencia la manifestación de los Arquetipos Luna- Plutón
combinados. Una muestra de la profunda interconexión vital: mi Vida atraviesa
en lo subjetivo-objetivo la elaboración de este proceso, y además estoy ‘rodeada
en el afuera vincular’ de muchas vivencias que atraviesan elaboraciones análogas. La
diferenciación Mundo Subjetivo –Mundo Objetivo continúa existiendo, pero no de un modo absoluto, pues claramente podemos observar correlaciones y “resonancias” entre todas las partes, las cuales,
seguramente colaboran entre sí a acompañar desde un lugar más empático y
comprensivo, sin que esto implique de ningún modo –quiero enfatizarlo- una
indiferenciación en los roles ‘terapeuta- paciente’. Para los colegas que no cuenten con una formación junguiana, la 'percepción de sincronicidades', a prima facie, pueden 'parecerles' simples 'proyecciones con identificaciones masivas'. Permítaseme aclarar, que aquí, el vínculo no es 'por identidad', sino por 'analogía'. En todo momento está preservada la diferenciación 'yo-tú'. Esto no impide apreciar la profunda interconexión de trasfondo, como señalé previamente. Aquí sugiero siempre, por este motivo, la supervisión y la auto observación crítica, rigurosa.
Y, como todos aquellos que acompañamos el
devenir y despliegue del mundo simbólico, siempre marco, además, la importancia de ‘acceder’
a cada historia, teniendo presente la ‘singularidad’ (más allá del reconocimiento
de las relaciones de analogía y semejanza), así como el abordaje desde un lugar
exploratorio, cuidadoso del otro, con una escucha atenta, receptiva y amorosa,
que vaya percibiendo ‘en el aquí y ahora’, esa apertura entre inconsciente y
consciente (lo que nunca me cansaré de subrayar).
Creo que una de las desgracias
mayores en el campo psicoterapéutico y disciplinas afines, es acercarse a una
historia de vida, a un otro, desde un lugar de ‘sabelotodo’. Lo que constituye el
verdadero compromiso es dejar en la puerta de entrada del consultorio la
información aprendida, e ingresar en el con una mente fresca y un corazón
abierto. Ambas cualidades permiten que el ‘saber’, se articule y entreteja, en cada ocasión, de un modo impensado,
creativo, renovado y adecuado para quienes se encuentran frente a nosotros.
Mi agradecimiento, como siempre, al Dr. en Físico Matemática, Adolfo R.
Ordóñez, a quien consulto constantemente, en los temas de su quehacer.
Sincronicidad: Por
tal, se entiende a la simultaneidad de cierto estado psíquico y de uno o varios
acontecimientos exteriores que se manifiestan como elementos objetivos paralelos en la vida del
sujeto, y que le son significativos
en relación con el estado subjetivo
del momento y viceversa.